Migration: Sending and Receiving Nations / Migración: naciones enviando y recibiendo
Migración: naciones enviando y recibiendo
Hace veinticinco años, me invitaron a hablar en una conferencia sobre migración en América Central y Sud América. La conferencia organizada en México reunió a líderes religiosos de diócesis de casi todas las naciones de América del Sur y Central. La conferencia habló de naciones que “envían” y “reciben” migrantes”. Una nación emisora tenía más personas que salían de las que entraban a la nación anualmente. En ese momento, Guatemala, Honduras, Salvador, Colombia y Bolivia eran naciones emisoras. Costa Rica, Brasil y Estados Unidos eran naciones receptoras. México fue considerado principalmente una nación “enviando” durante esa conferencia, pero se señaló que se estaba convirtiendo en una nación “enviando” y “recibiendo” al mismo tiempo.
En años recientes, cada vez más migrantes ingresan a México como destino, no solamente un paseo a los Estados Unidos. A medida que más y más migrantes se quedan en México, los líderes religiosos necesitan desarrollar nuevas formas de servir a los migrantes pobres.
Redentoristas de la Provincia Mexicana ofrecen misiones de evangelización en muchas comunidades empobrecidas. Reconocen la necesidad de que la Iglesia satisfaga las necesidades religiosas y espirituales de los migrantes. La Provincia ha formado un comité para estudiar formas de ministrar a los extranjeros que viven como residentes temporales en México. Me pidió que fuera parte de su estudio. Este viernes, me voy a México. Es emocionante ser parte de esta nueva iniciativa.
(Mañana, una consideración de los discípulos en el camino a Emaús)
(Si tienes observaciones o preguntas para Padre Migrante, envían las a padremigrante@gmail.com)
Migration: Sending and Receiving Nations
Twenty-five years ago, I was invited to speak at a conference on migration in Central and South America. The conference hosted in Mexico brought religious leaders from dioceses in almost every nation of South and Central America. The conference spoke of “sending” and “receiving” nations. A sending nation had more people leaving than entering the nation annually. At the time, Guatemala, Honduras, Salvado, Columbia and Bolivia were sending nations. Costa Rica, Brazil, and the United States were receiving nations. Mexico was primarily considered a “sending” nation during that conference, but it was noted that it was becoming both a “sending” and “receiving” nation at the same time.
In recent years, more and more migrants enter Mexico as a destination for their search for a better life than simply a way to arrive at the United States border. As more and more migrants stay in Mexico, religious leaders need to develop new ways of serving the migrant poor.
The Redemptorists of the Mexican Province offer missions of evangelization in many impoverished communities. They recognize a need for the Church to meet the religious and spiritual needs of migrants. A province committee to study ways to minister to foreign nationals living as temporary residents in Mexico asked me to be part of their study. On Friday of this week, I will be going to Mexico. It is exciting to be part of this new initiative.
(Tomorrow, a consideration of the disciples on the road to Emmaus)
(If you want Padre Migrante to respond to your concerns or questions, write to: padremigrante@gmail.com)
Oh Jesús, tú nos llamas: “Síganme”. Bendice, Señor, a todos los que acogen tu llamado. Puede que el camino no sea fácil, pero tenemos la confianza de que todo es posible si caminamos contigo. Que este viaje nos abra los ojos a las maravillas de tu amor por nosotros. Oramos por toda tu gente, por todos los creyentes e incrédulos, por los líderes y seguidores. Oramos por la sanación, el perdón, la compasión, la justicia y la paz. Oramos para que, al seguirte, nosotros también podamos ser pescadores de hombres. Bendícenos en nuestro viaje.
O Jesus, you call us, “Come after me.” Bless, O Lord, all who welcome your call. The path may not be easy, but we have confidence that all things are possible if we walk with you. May this journey, open our eyes to the wonders of your love for us. We pray for all your people, for all believers and unbelievers, for leaders and followers. We pray for healing, for forgiveness, for compassion, for justice, for peace. We pray that as we follow you, we too can be fishers of men. Bless us on our journey.