Gabriel was busy / Gabriel estaba ocupado
Gabriel estaba ocupado
El ángel Gabriel se apareció a tres personas, Zacarías, José y María. Los tres no estaban seguros de lo que significaba la llamada de Gabriel. El pobre Zacarías se quedó mudo por sus dudas, pero al final, cuando nació Juan, escribió: “Juan es su nombre”. Y pudo hablar. Él oró: “Bendito sea el Señor”.
Cuando Gabriel visitó a María, le dijo que ella concebiría un hijo, el Hijo de Dios. Mientras ella también se preguntaba cómo podría ser esto, respondió: “Yo soy la sierva del Señor”. Ella reflexionó sobre lo que significaba todo esto.
Gabriel se apareció a José en un sueño para asegurarle que tomara a María como su esposa. Él también se maravilló de la palabra y protegió a María mientras se preparaba para dar a luz.
Mientras reflexiono sobre las dudas y el asombro de Zacarías, María y José, he estado considerando nuestra temporada de Adviento. Conocemos el resto de la historia. Nos preparamos para la celebración del nacimiento de Jesús con alegría, planificando nuestras celebraciones litúrgicas y nuestras celebraciones familiares durante este tiempo. Nuestro Adviento es muy diferente a la experiencia de Zacarías, María y José. El lunes fui a una celebración prenavideña con nuestros Caballeros de Colón. Fue un lindo evento, pero le quita algo de anticipación a la celebración del nacimiento de Jesús. Que Dios los bendiga a todos a medida que se acercan a las celebraciones con familiares y amigos. Recordemos los últimos días de Adviento mientras oramos: “¡Oh, ven! ¡Oh, ven! Emmanuel”.
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Gabriel was busy
The angel Gabriel appeared to three people, Zechariah, Joseph and Mary. All three were uncertain of what the call of Gabriel meant. Poor Zechariah was made mute because of his doubts, but in the end, when John was born, he wrote, “John is his name.” And he was able to speak. He prayed, “Blessed be the Lord.”
When Gabriel visited Mary, he told her that she would conceive a son, the Son of God. While she also wondered how this could be, she responded, “I am the handmaid of the Lord.” She pondered what this all meant.
Gabriel appeared to Joseph in a dream to reassure him to take Mary as his wife. He too, wondered at the word and protected Mary as she prepared to give birth.
As I reflect on the doubts and wonder of Zechariah, Mary and Joseph, I have been considering our Advent season. We know the rest of the story. We prepare for the celebration of Jesus’ birth with joy, planning for our liturgical celebrations and our family celebrations during this season. Our Advent is much different than the experience of Zechariah, Mary and Joseph. On Monday, I went to a pre-Christmas celebration with our Knights of Columbus. It was a nice event, but it takes away some from the anticipation of celebrating Jesus’ birth. May God bless all of you as you approach celebrations with families and friends. Let us remember the last days of Advent as we pray, “O come! O, come! Emmanuel.”
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Oh Jesús, tú nos llamas: “Síganme”. Bendice, Señor, a todos los que acogen tu llamado. Puede que el camino no sea fácil, pero tenemos la confianza de que todo es posible si caminamos contigo. Que este viaje nos abra los ojos a las maravillas de tu amor por nosotros. Oramos por toda tu gente, por todos los creyentes e incrédulos, por los líderes y seguidores. Oramos por la sanación, el perdón, la compasión, la justicia y la paz. Oramos para que, al seguirte, nosotros también podamos ser pescadores de hombres. Bendícenos en nuestro viaje.
O Jesus, you call us, “Come after me.” Bless, O Lord, all who welcome your call. The path may not be easy, but we have confidence that all things are possible if we walk with you. May this journey, open our eyes to the wonders of your love for us. We pray for all your people, for all believers and unbelievers, for leaders and followers. We pray for healing, for forgiveness, for compassion, for justice, for peace. We pray that as we follow you, we too can be fishers of men. Bless us on our journey.
