Be “more courageous” / Sé “más valiente”
Sé “más valiente”
En octubre, el Papa Francisco llamó a los católicos a ser “más valientes” para enfrentar la crisis de COVID19. Su mensaje nos llama a no tener miedo o a limitarnos a la esperanza. Nos invita a una conversión profunda. “El punto de inflexión solo llegará si sabemos formar conciencias para no buscar soluciones fáciles para proteger a quienes ya están seguros, sino para proponer procesos de cambio duraderos en beneficio de las generaciones más jóvenes”. Estamos llamados a ser “la levadura que fermenta la masa”.
“El cambio de época que estamos viviendo exige un punto de inflexión. Miremos, en este sentido, a muchos signos de esperanza”. Llama la atención a quienes trabajan para salvar vidas y consolar a quienes enfrentan muchas pérdidas debido al COVID. Agradece a quienes trabajan por el cambio. Todavía hay muchas dificultades que enfrentamos debido a la pandemia y la desesperación, la ira y la intolerancia necesitan nuestra atención. Sin embargo, necesitamos ser personas de esperanza.
“Sé evangelizados por los pobres”
Durante muchos años, nuestra Congregación Redentorista ha identificado nuestra misión como llamada a “evangelizar y ser evangelizados por los pobres”. La misión comienza con la confianza de que Jesús se revela en los pobres. Dijo en Mateo 25: “Cuando tuve hambre, me dieron de comer. Cuando tuve sed, me dieron de beber. Cuando era forastero, me acogieron”. La respuesta de las personas al sufrimiento puede enseñarnos los caminos de Dios.
En lugar de centrarse en la desesperación de los pobres, considere su respuesta al sufrimiento. En los desiertos de Arizona, hay muchas señales de quienes cruzan la frontera. Uno puede encontrar huellas, botellas de agua desechadas, ropa tirada a un lado y señales de los peligros que enfrentan los migrantes cuando buscan refugio. También hay momentos en que uno ve un lugar de descanso para los migrantes. Puede haber una cruz hecha de ramas y restos de cactus secos. Hay un rosario colgado en un árbol. Una estampa o pequeña estatua religiosa representa la oración del migrante. En medio de grandes dificultades, uno ve esperanza. Al ver tales sitios, uno no sabe el final de la historia del migrante que pasó, pero reconoce la esperanza del migrante.
Como dice el Papa Francisco, “Necesitamos ser personas de esperanza”.
(Si tienes observaciones o preguntas para Padre Migrante, envían las a padremigrante@gmail.com)
Be “more courageous”
In October, Pope Francis has called on Catholics to be “more courageous” in tackling the crisis of COVID19. His message urges us to not be afraid or to limit ourselves to hope. He invites us to a profound conversion. “The turning point will only come if we know how to train consciences not to look for easy solutions to protect those who are already secure, but to propose lasting processes of change for the benefit of the younger generations.” We are called to be “the yeast that leavens the dough.”
“The epochal change we are going through demands a turning point. Let us look, in this sense, to many signs of hope.” He calls attention to those working to save lives and comfort those who face many losses due to COVID. He thanks those working for change. There are still many hardships that we face due to the pandemic and despair, anger, and intolerance need our attention. Yet, we need to be people of hope.
“To be evangelized by the poor”
For many years, our Redemptorist Congregation has identified our mission as being called “to evangelize and to be evangelized by the poor.” The mission begins with confidence that Jesus reveals himself in the poor. He said in Matthew 25: “When I was hungry, you gave me to eat. When I was thirsty, you gave me to drink. When I was a stranger, you welcomed me.” The response of people to suffering can teach us the ways of God.
Rather than focus on the desperation of the poor, consider their response to suffering. In the deserts of Arizona, there are many signs of those crossing the border. One may find footprints, discarded water bottles, clothing toss aside and signs of the dangers that migrants face as they seek refuge. There are also moments when one sees a place of rest for migrants. There may be a cross made of branches and dried-up cactus remains. There is a rosary hanging on a tree. A holy card or small religious statue represents the prayer of the migrant. In the midst of great hardship, one sees hope. When seeing such sites, one does not know the end of the story of the migrant who passed by, but one recognizes the hope of the migrant.
As Pope Francis says, “We need to be people of hope.”
(If you want Padre Migrante to respond to your concerns or questions, write to: padremigrante@gmail.com)
Oh Jesús, tú nos llamas: “Síganme”. Bendice, Señor, a todos los que acogen tu llamado. Puede que el camino no sea fácil, pero tenemos la confianza de que todo es posible si caminamos contigo. Que este viaje nos abra los ojos a las maravillas de tu amor por nosotros. Oramos por toda tu gente, por todos los creyentes e incrédulos, por los líderes y seguidores. Oramos por la sanación, el perdón, la compasión, la justicia y la paz. Oramos para que, al seguirte, nosotros también podamos ser pescadores de hombres. Bendícenos en nuestro viaje.
O Jesus, you call us, “Come after me.” Bless, O Lord, all who welcome your call. The path may not be easy, but we have confidence that all things are possible if we walk with you. May this journey, open our eyes to the wonders of your love for us. We pray for all your people, for all believers and unbelievers, for leaders and followers. We pray for healing, for forgiveness, for compassion, for justice, for peace. We pray that as we follow you, we too can be fishers of men. Bless us on our journey.