Who is a migrant? / ¿Quién es un migrante?
¿Quién es un migrante?
Un obispo preguntó: “¿Quién es un migrante?” Él dijo: “Tú eres el experto. Escribiste el libro sobre el ministerio migrante”. Me dio más crédito del que jamás podría merecer. He estado caminando con migrantes e inmigrantes en los Estados Unidos por más de treinta años. He trabajado con jóvenes de la calle en un barrio pobre, he predicado misiones parroquiales bilingües en quince estados, he trabajado con inmigrantes rurales y trabajadores indocumentados en agricultura, construcción, turismo e industrias que emplean trabajadores temporales. Más recientemente, he estado involucrado en un estudio de la situación de los migrantes y refugiados en la frontera entre Estados Unidos y México.
Hace diez años, escribí un libro, La Fe del Migrante. Fue para introducir a la gente a mejores prácticas en el ministerio con personas de movilidad. No fue un estudio científico o académico. Fue una forma de honrar la fe que se muestra en las personas que viven en la periferia de la vida católica. Mi propósito era motivar a las personas a evangelizar y dar atención pastoral a las personas con movilidad. La mayoría de mis observaciones de la vida de los migrantes fueron historias anecdóticas basadas en la vida de las personas que tocaron mi vida. El Papa Francisco afirma con precisión que “los pobres tienen una especial apertura a la fe”. Había caminado con personas a lo largo de los Estados Unidos y México para dejar que las personas en los márgenes de la sociedad me contaran las historias de su fe. Los pobres me han evangelizado verdaderamente.
Si bien la migración de pueblos ha tenido lugar desde el comienzo de la creación, el nivel más alto de migración en la historia mundial está teniendo lugar en todo el mundo hoy en día. El impacto de tal movilidad desafía todos los aspectos de la vida humana. Algunas personas creen que la migración global es un problema por resolver. Temen que los migrantes sean una amenaza para la seguridad y la paz. Los líderes políticos explotan esos temores, condicionando a los líderes nacionales a tratar a los migrantes y refugiados como amenazas a la seguridad, la estabilidad económica y la forma de vida en naciones estables.
Respondiendo a la pregunta
“El migrante no es un problema para resolver, sino una persona que es nuestro hermano y nuestra hermana”. La migración global es una preocupación humanitaria. El Papa Francisco nos llama a reconocer la “falta de atención espiritual” a los pobres. (EG. 200) Necesitamos una pastoral integral con los migrantes que incluya todas las necesidades humanas del migrante, sin olvidar las necesidades espirituales del migrante. “Nuestra opción preferencial por los pobres debe traducirse principalmente en una atención religiosa privilegiada y preferencial.” (EG. 200)
(Si tienes observaciones o preguntas para Padre Migrante, envían las a padremigrante@gmail.com)
Who Is a Migrant?
A bishop asked, “Who is a migrant?” He said, “You’re the expert. You wrote the book on migrant ministry.” He gave me more credit than I could ever deserve. I have been walking with migrants and immigrants in the United States for over thirty years. I have worked with inner city street youth, preached parish bilingual missions in fifteen states, worked with rural immigrant and undocumented workers in agriculture, construction, tourism and industries that employ seasonal workers. Most recently I have been engaged in a study of the situation of migrants and refugees on the United States / Mexico border.
Ten years ago, I wrote a book, Migrant Faith. It was to introduce people to better practices in ministry with people of mobility, but it was not a scientific or academic study. It was a way to honor the faith displayed in people who live on the periphery of Catholic life. My purpose was to motivate people to evangelize and give pastoral care to people of mobility. Most of my observations of the lives of migrants were anecdotal stories based on the lives of people who touched my life. Pope Francis accurately states that “the poor have a special openness to the faith”. I had walked with people throughout the United States and Mexico to let people on the margins of society tell me the stories of their faith. The poor have truly evangelized me.
While migration of peoples has taken place since the beginning of creation, the highest level of migration in world history is taking place around the world today. The impact of such mobility challenges all aspects of human life. Some people believe that global migration is a problem to be solved. They fear migrants as being a threat to security and peace. Political leaders exploit those fears, conditioning national leaders to treat migrants and refugees as threats to security, economic stability and the way of life in stable nations.
Responding to the question
The migrant is not a problem to be solved, but a person who is our brother and sister. Global migration is a humanitarian concern. Pope Francis calls us to recognize the “lack of spiritual care” for the poor. (EG. 200) We need a comprehensive ministry with migrants than includes all of the migrant’s human needs, without forgetting about the migrant’s spiritual needs. Our preferential option for the poor must mainly translate into a privileged and preferential religious care. (EG. 200)
(If you want Padre Migrante to respond to your concerns or questions, write to: padremigrante@gmail.com)
Oh Jesús, tú nos llamas: “Síganme”. Bendice, Señor, a todos los que acogen tu llamado. Puede que el camino no sea fácil, pero tenemos la confianza de que todo es posible si caminamos contigo. Que este viaje nos abra los ojos a las maravillas de tu amor por nosotros. Oramos por toda tu gente, por todos los creyentes e incrédulos, por los líderes y seguidores. Oramos por la sanación, el perdón, la compasión, la justicia y la paz. Oramos para que, al seguirte, nosotros también podamos ser pescadores de hombres. Bendícenos en nuestro viaje.
O Jesus, you call us, “Come after me.” Bless, O Lord, all who welcome your call. The path may not be easy, but we have confidence that all things are possible if we walk with you. May this journey, open our eyes to the wonders of your love for us. We pray for all your people, for all believers and unbelievers, for leaders and followers. We pray for healing, for forgiveness, for compassion, for justice, for peace. We pray that as we follow you, we too can be fishers of men. Bless us on our journey.