Accompaniment / Acompañamiento
Acompañamiento
¿Cómo fue para Pedro, Andrés, Santiago y Juan escuchar a Jesús decirles: “síganme”? Fue una invitación a caminar con Jesús, a aprender de él, a hacer una aventura con él. Dejaron sus barcas y sus familias a aprender de él como su maestro. Él no enseñó como otros maestros. Por supuesto, dio el Sermón del Monte y les enseñó por parábolas, pero más enseñó con el ejemplo. Mientras caminaban con Jesús, vieron a otros de maneras que no habrían aprendido con otros maestros.
Caminaron con personas con las que nunca habrían caminado. Caminaban con leprosos, paralíticos, ciegos, sordos, padres con hijos moribundos, recaudadores de impuestos y otros considerados pecadores, las mujeres fieles de Jerusalén y las prostitutas. Mientras caminaban con personas de todos los ámbitos de la vida, llegaron a comprender el amor de Dios por toda la creación. Mientras caminaban con todos, llegaron a una nueva conciencia de que Dios ama a toda la creación. La llamada a servir a Dios es una llamada a acompañar a todas las personas, pero especialmente al marginado, al extraño.
Se me ha dado la gran tarea de enseñar sobre el ministerio como “acompañamiento”. A menudo hablo de mis primeros días en el ministerio hispano cuando me dijo: “Si no caminas con mi gente, no te molestes en aprender español”. El tema central del ministerio a los migrantes es “Camina con mi pueblo”. Ore para que nuestro programa Sembrador se ofrezca la próxima semana en Yuma, Arizona.
(Si tienes observaciones o preguntas para Padre Migrante, envían las a padremigrante@gmail.com)
Accompaniment
What was it like for Peter, Andrew, James and John to hear Jesus tell them, “Follow me”? It was an invitation to walk with Jesus, to learn from him, to go on an adventure with him. They left their boats and their families to learn from him as their teacher. He did not teach like other teachers. Of course, he gave the Sermon on the Mount and he taught them by parables, but he taught by example. As they walked with Jesus, they saw other people in ways that they would not have learned with other teachers.
They walked with people whom they would never have walked with before. They walked with lepers, paralytics, the blind, the deaf, parents with dying children, tax collectors and others considered public sinners, the faithful women of Jerusalem and the prostitutes. As the walked with people from all walks of life, they came to an understanding of God’s love for all of creation. As they walked with everyone, they came to new awareness of God loving all of creation. The call to serve God is a call to accompany all people, but especially the outcast, the stranger.
I have been given a great assignment to teach about ministry as “accompaniment”. I often speak about my early days in Hispanic ministry when I was told, “If you do not walk with my people, do not bother to learn Spanish.” The is the central theme of migrant ministry, “Walk with my people.” Pray for our Sembrador program to be offered next week in Yuma, Arizona.
(If you want Padre Migrante to respond to your concerns or questions, write to: padremigrante@gmail.com)
Oh Jesús, tú nos llamas: “Síganme”. Bendice, Señor, a todos los que acogen tu llamado. Puede que el camino no sea fácil, pero tenemos la confianza de que todo es posible si caminamos contigo. Que este viaje nos abra los ojos a las maravillas de tu amor por nosotros. Oramos por toda tu gente, por todos los creyentes e incrédulos, por los líderes y seguidores. Oramos por la sanación, el perdón, la compasión, la justicia y la paz. Oramos para que, al seguirte, nosotros también podamos ser pescadores de hombres. Bendícenos en nuestro viaje.
O Jesus, you call us, “Come after me.” Bless, O Lord, all who welcome your call. The path may not be easy, but we have confidence that all things are possible if we walk with you. May this journey, open our eyes to the wonders of your love for us. We pray for all your people, for all believers and unbelievers, for leaders and followers. We pray for healing, for forgiveness, for compassion, for justice, for peace. We pray that as we follow you, we too can be fishers of men. Bless us on our journey.