Diversity of rural America / Diversidad de la América rural
Diversidad de la América rural
La gente de los pueblos pequeños de las zonas rurales de Estados Unidos necesita hoy la atención de los líderes religiosos católicos. Un agricultor me dijo: “honre el pasado y adáptese al hoy”. Dijo que no hay vuelta atrás a lo que algunos podrían llamar los “buenos viejos tiempos”. Fue claro en no irrespetar el pasado, sino reflexionar sobre sus virtudes, su gracia y el fundamento que nos dio. Recordó los cambios que sus abuelos y padres vieron en la agricultura cuando pasaron del arado detrás de caballos y bueyes a tractores, camiones y automatización. La gratitud y la humildad son esenciales para honrar el pasado.
El cambio siempre ha sido parte de las comunidades agrícolas, pero la ciencia y la tecnología han cambiado radicalmente la producción de alimentos en las últimas dos generaciones. Hoy en día, hay máquinas en los campos que no se parecen en nada a los tractores de la juventud del agricultor. Considerando a mis preocupaciones por el ministerio rural, dijo: “Así como los tractores de mi infancia no están capaces a las tareas agrícolas de hoy, su ministerio necesita adaptarse a las realidades de hoy”.
Los cambios en la agricultura son sólo una parte de la realidad cambiante de la vida rural actual. Históricamente, la gente de las comunidades rurales se dedicaba a la agricultura y a la producción de materiales utilizados en la construcción de las ciudades modernas. La agricultura moderna es corporativa y el agricultor independiente está desapareciendo. La vida agraria, si bien está presente en las comunidades rurales, hoy en día es una parte cada vez menor de la economía y el desarrollo rural. El turismo, la tecnología, la construcción, el transporte, la manufactura, la atención médica, la educación, el militar y los servicios gubernamentales impulsan las economías de muchas comunidades rurales. Los trabajadores inmigrantes desempeñan hoy un papel importante en todos los sectores de las economías rurales, no sólo en la agricultura. Los trabajadores migrantes y estacionales provienen de todas partes del mundo.
Durante mis primeros diecisiete años de ministerio, serví principalmente en ciudades bastante grandes; Wichita, Minneapolis, Denver y San Luis. Como director de vocaciones, a menudo conducía por el Medio Oeste o volaba sobre grandes extensiones de la América rural y, como mucha gente, tenía una visión bastante estrecha de la economía de la vida rural. Hace treinta años, dirigí un equipo misionero bilingüe para los Redentoristas, y la mayoría de las misiones parroquiales que dimos fueron en comunidades rurales en trece estados, desde Arkansas y Missouri hasta la costa oeste. Si bien muchas de las comunidades se dedicaban a la agricultura, muchas tenían comunidades turísticas cercanas, prisiones, bases militares, universidades y centros de investigación. Los rastros de carne, las lecherías y una variedad de instalaciones de procesamiento y fabricación de alimentos proporcionaron empleo en muchas ciudades pequeñas.
La diversificación de las economías rurales está cambiando rápidamente la vida en las comunidades rurales. Hoy en día, empresas de tecnología como Google, Facebook, Amazon y los centros de distribución de Walmart y otras corporaciones están trayendo más diversidad étnica y económica a las zonas rurales de Estados Unidos. Además, la atención médica incluye la diversidad étnica no solo en el mantenimiento y la cocina, sino que muchos servicios médicos profesionales en las zonas rurales de Estados Unidos son brindados por médicos, terapeutas, y enfermeras inmigrantes. Incluso dentro de la Iglesia Católica, cada vez más parroquias rurales cuentan con clérigos y ministros laicos inmigrantes.
Al mismo tiempo, nuestro alcance católico se ha ido reduciendo debido a la falta de vocaciones sacerdotales y la reestructuración de muchas diócesis. El modelo de mega iglesia puede tener algunos beneficios en las comunidades metropolitanas, pero los líderes religiosos católicos deben adaptarse a los cambios que se están produciendo en las zonas rurales de Estados Unidos. En los próximos blogs, consideraré varios aspectos de la diversidad en la América rural actual.
(Si tienes observaciones o preguntas para Padre Migrante, envían las a padremigrante@gmail.com)
Diversity of rural America
People in small towns in rural America need the attention of Catholic religious leaders today. A farmer told me, “honor the past and adapt for today”. He said that there is no return to what some may call the “good old days”. He was clear about not dismissing the past, but to reflect on its virtues, its grace and the foundation it gave us. He recalled the changes that his grandparents and parents saw in agriculture as they moved from plowing behind horses and oxen, to tractors, trucks and automation. Gratitude and humility are essential to honoring the past.
Change has always been part of agricultural communities, but science and technology has radically changed the production of food over the past two generations. Today, there are machines in the fields that look nothing like the tractors of the farmer’s youth. Addressing my concerns for rural ministry, he said, “Just as the tractors of my childhood are not up to the task of farming today, your ministry needs to adapt to the realities of today.”
Changes in agriculture are only part of the changing reality of rural life today. Historically people in rural communities were engaged in agriculture and production of materials used in construction of modern cities. Modern agriculture is corporate, and the independent farmer is disappearing. The agrarian life, while present in rural communities, is a shrinking portion of rural economics and development today. Tourism, technology, construction, transportation, manufacturing, health care, education, military and government service drive the economies of many rural communities. Migrant and immigrant workers play a significant role in all sectors of rural economies today, not just agriculture. Migrant and seasonal workers come from all parts of the world.
During my first seventeen years of ministry, I served primarily in rather large cities; Wichita, Minneapolis, Denver and St. Louis. As vocation director, I often drove around the Midwest or flew over great expanses of rural America, and like many people, I had a rather narrow view of the economics of rural life. Thirty years ago, I led a bilingual mission team for the Redemptorists, and most of the parish missions that we gave were in rural communities in thirteen states, from Arkansas and Missouri to the west coast. While many of the communities were engaged in agriculture, many had resort communities nearby, prisons, military bases, universities and research centers. Meat packing, dairies, and a variety of food processing and manufacturing facilities provided jobs in many small towns.
The diversification of rural economies is rapidly changing life in rural communities. Today, technology companies like Google, Facebook, Amazon, and the distribution centers of Walmart and other corporations are bringing more ethnic and economic diversity to rural America. Also, healthcare includes ethnic diversity not only in maintenance and cooking, but many professional medical services in rural America is provided by doctors, therapists, nurses and more who are immigrants. Even within the Catholic Church, more and more rural parishes are staffed by immigrant clergy and lay ministers.
At the same time, our Catholic outreach has been shrinking with a lack of priestly vocations and the restructuring of many dioceses. The mega-church model may have some benefits in metropolitan communities, but Catholic religious leaders need to adapt to the changes taking place in rural America. For the next few blogs, I will consider various aspects of diversity in rural America today.
Donations for Redemptorist Migrant Ministry
(If you want Padre Migrante to respond to your concerns or questions, write to: padremigrante@gmail.com)
Oh Jesús, tú nos llamas: “Síganme”. Bendice, Señor, a todos los que acogen tu llamado. Puede que el camino no sea fácil, pero tenemos la confianza de que todo es posible si caminamos contigo. Que este viaje nos abra los ojos a las maravillas de tu amor por nosotros. Oramos por toda tu gente, por todos los creyentes e incrédulos, por los líderes y seguidores. Oramos por la sanación, el perdón, la compasión, la justicia y la paz. Oramos para que, al seguirte, nosotros también podamos ser pescadores de hombres. Bendícenos en nuestro viaje.
O Jesus, you call us, “Come after me.” Bless, O Lord, all who welcome your call. The path may not be easy, but we have confidence that all things are possible if we walk with you. May this journey, open our eyes to the wonders of your love for us. We pray for all your people, for all believers and unbelievers, for leaders and followers. We pray for healing, for forgiveness, for compassion, for justice, for peace. We pray that as we follow you, we too can be fishers of men. Bless us on our journey.